Paroles et traduction Enigma - La Historia De 'Agnus Dei'

La Historia De 'Agnus Dei'

Has cruzado el umbral
Avanzas por un recibidor
Paredes y techos cubiertos de espejos
Aquí vuelven esas voces que murmuran en tu cabeza
Ves tu reflejo en 100 espejos y el miedo te dice: "date la vuelta"
Estás en un laberinto sin salida, pero la persuasión susurra: "adelante
sube las escaleras hasta el santuario"
Sobre la puerta una frase familiar
"Perded toda esperanza los que entráis"
Obedeces y dejas tu esperanza en el ropero
Se te acerca un payaso: una sonrisa divertida en una cara triste
Te ofrece consuelo, como no te interesa, se molesta
Cuando continúas, lo escuchas gritar: "maldito Agnus Dei"
Da igual
Avanzas por el pasillo, pasas cien puertas
y escuchas jadeos y gemidos; gritos de placer que vienen de dentro
Puedes oler el aroma del pecado y de la piel desnuda
¡Ah!, el deseo insaciable de amor
¿Alguna vez has conocido la felicidad?
Te aferras a un recuerdo, hace que te rindas, pero los labios que besas están fríos, los ojos en los que lees mienten
Sólo hay un suspiro de aire entre el cielo y el inferno
Aprendes la lección, ignoras la lección
Te han engañado: la historia de tu vida
Odias tu reflejo
Rompes el espejo
Andas sobre los cristales rotos y estás fuera en la calle
Ahí hay una Iglesia, más bien una Catedral
Te parece que debes acercarte
Unas estatuas de piedra guardan el pórtico
Voces en el aire
"Se acerca vuestra redención"
La puerta está cerrada: nunca luches contra tu curiosidad
Llamas y alborotas
Despiertes a las estatuas, de hecho, empiezan a moverse
Entre lamentos y quejidos van a por ti
Justo antes de que te agarren, se abre el pórtico; desde el interior un humo rojo cubre el suelo
La curiosidad piensa por sí misma
Vas a por todas y te adentras en la oscuridad
Suena una campana

The Story of 'Agnus Dei'

You've crossed the threshold,
Stepping into a hallway,
Walls and ceilings adorned with mirrors,
Here, those murmuring voices in your head return.
You see your reflection in a hundred mirrors, and fear tells you: "turn back."
You're in a labyrinth with no escape, but persuasion whispers: "go on,
climb the stairs to the sanctuary."
Above the door, a familiar phrase:
"Abandon all hope, ye who enter here."
You obey and leave your hope in the cloakroom.
A clown approaches you: a playful smile on a sad face.
He offers you solace, as you show no interest, he becomes annoyed.
As you continue, you hear him shout: "damn Agnus Dei."
It doesn't matter.
You walk down the corridor, passing a hundred doors,
and you hear gasps and moans; cries of pleasure coming from within.
You can smell the scent of sin and naked skin.
Ah, the insatiable desire for love.
Have you ever known happiness?
You cling to a memory, it makes you surrender, but the lips you kiss are cold, the eyes you read into lie.
There's only a breath of air between heaven and hell.
You learn the lesson, you ignore the lesson.
You've been deceived: the story of your life.
You hate your reflection.
You break the mirror.
You walk over the broken glass and find yourself out on the street.
There's a Church there, more like a Cathedral.
You feel you must approach.
Stone statues guard the portico.
Voices in the air:
"Your redemption is near."
The door is closed: never fight your curiosity.
You knock and make a fuss.
You awaken the statues, in fact, they begin to move.
With moans and groans, they come for you.
Just before they grab you, the portico opens; from within, red smoke covers the ground.
Curiosity thinks for itself.
You go all in and step into the darkness.
A bell rings.