Текст и перевод песни George Dalaras - America Insurrecta - Live

America Insurrecta - Live

Nuestra tierra, ancha tierra, soledades,
Nuestra tierra, se pobló de rumores, brazos, bocas.
Una callada sílaba iba ardiendo,
Congregando la rosa clandestina
Hasta que las praderas trepidaron
Cubiertas de metales y galopes.
Fue dura la verdad como un arado.
Rompió la tierra, estableció el deseo,
Hundió sus propagandas germinales
Y nació en la secreta primavera.
Fue callada su flor, fue rechazada
Su reunión de luz, fue combatida
La levadura colectiva, el beso
De las banderas escondidas,
Pero surgió rompiendo las paredes,
Apartando las cárceles del suelo.
El pueblo oscuro fue su copa,
Recibió la substancia rechazada,
La propagó en los límites marítimos,
La machacó en morteros indomables.
Y salió con las páginas golpeadas
Y con la primavera en el camino.
Hora de ayer, hora de mediodía,
Hora de hoy otra vez, hora esperada
Entre el minuto muerto y el
Que nace,
En la erizada edad de la mentira.
Patria, naciste de los leñadores,
De hijos sin bautizar, de carpinteros,
De los que dieron como un ave extraña
Una gota de sangre voladora,
Y hoy nacerás de nuevo duramente
Desde donde el traidor y el carcelero
Te creen para siempre sumergida.
Hoy nacerás del pueblo como entonces.
Hoy saldrás del carbón y del rocío.
Hoy llegarás a sacudir las puertas
Con manos maltratadas, con pedazos
De alma sobreviviente, con racimos
De miradas que no extinguió la muerte,
Con herramientas hurañas
Armadas bajo los harapos.

America Insurrecta - Live

Our vast country of serene solitude,
Filled with bustling and passionate souls,
A hushed whisper ignited and spread,
Gathering the clandestine rose
Until the prairies thundered
Beneath the weight of metal and galloping hooves.
Truth struck like a deep-tilling plow,
Breaking the fallow, planting desire,
Imprinting its subversive message,
And springtime's secret was born.
Its blossom was hushed, rejected,
Its gathering light, fought against,
The communal leaven, the kiss
Of hidden banners,
But it burst forth, shattering walls,
Breaking the prison's grip.
The humble people became its chalice,
Embraced the spurned essence,
Spread it to distant shores,
Crushed it in indomitable mortars.
And emerged with battered pages,
And springtime in their stride.
Yesterday's hour, midday's hour,
Today's hour again, the awaited,
Between the stillborn minute and
The nascent,
In this bristling age of deceit.
My country, you were born of lumberjacks,
Of children unbaptized, of carpenters,
Of those who gave, like strange birds,
A flying drop of their blood,
And today you will be reborn in suffering
From where the traitor and the jailer
Believe you are forever drowned.
Today you will be reborn from the people, as before.
Today you will rise from coal and dew.
Today you will come to shake the gates
With scarred hands, with fragments
Of surviving souls, with clusters
Of gazes that death could not extinguish,
With rough tools
Weaponized beneath the rags.