Текст и перевод песни Menuda Coincidencia - Los Estratos

Los Estratos

Dices que el que no habla, Dios no lo oye. Oye
Pero, ¿cómo es eso que tú dices? ¿Bises
Es lo que te pido y ni me miras? Tiras
Por el inodoro lo que dices

Dices que el que no habla, Dios no lo oye. Oye
Pero, ¿cómo es eso que tú dices? ¿Bises
Es lo que te pido y ni me miras? Tiras
Totalmente a león lo que te dices

Se nos dio a elegir entre el silencio y la palabra:
ésta, privilegio de señores y hombres libres;
Aquél, imposición agria y desalmada
Barrote de la cárcel en que los menesterosos viven
Así la historia se escribe; unos hablan, otros callan;
Sucesión átona que abarca y desborda lo inteligible
Hasta hacernos copartícipes de este canto de cigarra
Que diserta, que bala, que elucubra, que gime
Yo tampoco sé a qué vine; yo también lo hago en voz alta;
Yo, el marcapasos de Martha; yo, ¿porqué ahora no sonríes?;
Tres tristes tigres transidos por dos, tres trabas;
Tráete las guamas: ¿qué no ves? la ocasión aquí lo exige
Nenes hiperactivos zarandeando sus sonajas;
Juguetes en que residen, de la humanidad, batallas miles...
¿Y a quién le importa?: valor perdido en la noche de las causas
Hay que dar las gracias... ¿Te acuerdas?: ¿cómo se dice?
Aprendemos a hablar como nos aprendemos las tablas;
Hay quien orgullosamente toda su vida las repite
Dos por una... Eterno amante soy de eterna amada...
Trece por cincuenta y siete... ¡Ya nos cayó el chahuistle!
Los factores mismos son formas vaciadas
Y la nada por la nada es igual a los fines por los fines
Ejemplo: un vandálico ¡Aquí estamos! que de arte se disfraza;
Y si se le pregunta a qué vino, responderá: Sí, sí vine
Y el ruido que provocan las respuestas de esta calaña
Aparte de ensordecer, sacan al personal de sus casillas;
Y lo llevan a actuar raro, a aprobar medidas drásticas
O en el mejor de los casos, a enunciar puntos suspensivos
Quizá pedirle al arte elocuencia es pedirle al peral manzanas;
Pero, digo, al hacerlo, no es que se le demerite:
Es un intento por entender (algo de lo que ahora pocos tienen ganas);
¡ni modo de decirle que sí, nomás pa′ que no se agüite!
La libertad de expresión puede devenir en coartada
Para que los gruñidos más gruñidos el tiempo aire dominen
Se me viene a la mente la profecía esa de la fama:
Las vidas, los minutos, se van de quince en quince...
Y queda la satisfacción de exhalar una bocanada...
Satisfacción rosa... que no suscita bifes...
Una cabeza asintiendo enérgicamente, aunque adormilada...
Y un turno que se espera... para poder decir: Ya dije

The Strata

You say that he who doesn’t speak, God doesn’t hear him. Hear.
But, how’s that what you say? Encores
Is that what I ask for and you don’t even look at me? You flush
Down the toilet what you say

You say that he who doesn’t speak, God doesn’t hear him. Hear.
But, how’s that what you say? Encores
Is that what I ask for and you don’t even look at me? You totally toss
To the lion what you say to yourself

We were given the choice between silence and the word:
The latter, the privilege of lords and free men;
The former, a sour and heartless imposition
A bar of the prison in which the needy live
Thus history is written; some speak, others are silent;
An atonal succession that encompasses and overflows the intelligible
To make us partakers of this cicada song
That discourses, that bleats, that elucidates, that moans
I don’t know why I came either; I also do it out loud;
I, Martha's pacemaker; me, why aren’t you smiling now?;
Three sad tigers crossed by two, three bars;
Bring the guamas: can’t you see? The occasion here demands it
Hyperactive babies shaking their rattles;
Toys in which thousands of battles of humanity reside...
And who cares?: Value lost in the night of causes
We must give thanks... Do you remember?: How do you say it?
We learn to speak as we learn our multiplication tables;
There are those who proudly repeat them all their lives
Two by one... I am the eternal lover of the eternal beloved...
Thirteen by fifty-seven...! Now the weevil has fallen on us!
The factors themselves are emptied forms
And nothing by nothing is equal to ends by ends
Example: a vandalic "Here we are!" that disguises itself as art;
And if you ask him what he came for, he will answer: Yes, yes I came
And the noise that the answers of this ilk provoke
Apart from deafening, they drive people out of their boxes;
And they lead them to act strangely, to approve drastic measures
Or at best, to enunciate ellipses
Perhaps asking art for eloquence is asking the pear tree for apples;
But, I say, in doing so, it is not that it is demerited:
It is an attempt to understand (something that few people now want);
There’s no way to tell him yes, just so he doesn’t get upset!
Freedom of expression can become an alibi
So that the most guttural growls dominate the airtime
That prophecy about fame comes to mind:
Lives, the minutes, go by fifteen by fifteen...
And there remains the satisfaction of exhaling a mouthful...
Pink satisfaction... which doesn’t raise encores...
A head nodding vigorously, albeit sleepy...
And a turn that is expected... to be able to say: I already said