Текст и перевод песни Raulín Rosendo - Cruz de navajas

Cruz de navajas

A las cinco se cierra la barra del treinta y tres
Pero Mario no sale hasta las seis
Jajaja
Y si encima le toca hacer caja, despídete
Casi siempre se le hace de día
Mientras María ya se ha puesto en pie
Ha hecho la casa, ha hecho hasta el café
Y le espera medio desnuda

Mario llega cansado y saluda, sin mucho afán
Quiere cama pero otra variedad
Y María se moja las ganas en el café
Magdalenas del sexo convexo
Luego al trabajo
En un gran almacén
Cuando regresa no hay más que un somier
Taciturno que usan por turnos

Cruz de navajas por una mujer
Brillos mortales despuntan al alba
Las sangres que tiñen de malva el amanecer

Pero hoy como ha habido redada en el treinta y tres
Mario vuelve a las cinco menos diez
Por calle vacía a lo lejos se ve
A los novios comiéndose a besos
El pobre Mario se quiere morir
Cuando regresa, para descubrir
Que es María con compañía

Cruz de navajas por una mujer
Brillos mortales despuntan al alba
Las sangres que tiñen de malva el amanecer

Sobre Mario de bruces tres cruces
Una en la frente la que más dolió
Otra en el pecho la que le mató
Y otra miente en el noticiero
Dos drogadictos en plena ansiedad
Roban y matan a Mario Postigo
Mientras su esposa es testigo desde el portal.

Dagger of Blades

At five, the bar at Thirty-Three closes
But Mario doesn't leave until six
Ha-ha
And if he has to close out the register, forget it
It's almost always daybreak before he's done
Meanwhile, María is already up
She's cleaned the house, even made coffee
And she's waiting for him, half-naked

Mario arrives tired and greets her without much enthusiasm
He wants to go to bed, but for a different reason
And María drowns her desires in coffee
Convex sex muffins
Then off to work
At a big department store
When he gets back, there's nothing but a bed frame
A taciturn piece of furniture they use in turns

Dagger of blades for a woman
Deadly glints emerge at dawn
Blood stains the dawn with crimson

But today, since there was a raid at Thirty-Three
Mario returns at ten to five
In the empty street, in the distance, he sees
Lovers kissing each other
Poor Mario wants to die
When he gets back, he discovers
That María has company

Dagger of blades for a woman
Deadly glints emerge at dawn
Blood stains the dawn with crimson

Over Mario, face down, three crosses
One on his forehead, that hurt the most
Another on his chest, that killed him
And another one they lie about in the news
Two junkies in full-blown anxiety
Rob and kill Mario Postigo
While his wife watches from the doorway.