paroles de chanson Tinieblas - Lirika Inverza

Los hombres no lloran decía padre,
Hasta que murió mi abuelo.
Y... no le bastaban los pañuelos,
Ese día comprendí que aunque existen los hombres duros,
Los momentos más crudos convierten en agua al hielo.
Nadie es tan blanco ni tan negro,
La dualidad es la piedra anular del universo.
Se crece más en el descenso, pues al probar la miseria
Nace la sed del progreso.
Hijo de padres comerciantes, sin lujos,
Ni carencias, valorando lo importante, así aprendi desde pequeño,
Que los sueños se cumplen solo si luchas por ellos.

Por eso es que me dejo el arte, cada canción que escribo,
Palabra por palabra, por eso mis versos son armas,
Que guardo en un cajón y saco solo para usarlas.
Mi madre me dijo un día,
Que para no perderme usará el corazón de guía, yo
Era muy pequeño para entender lo que decía, a
Hora me toco el pecho antes de cambiar de vía.
Y aunque no siempre me resulta,
Se que en cada tropiezo el aprendizaje se oculta.
Deje de ser un niño, welcome tu vida adulta,
Ahora cada respiro es un paso hacía la tumba.

(Se que ahora no todo marcha bien, pero no me permitiré que caiga.
Quizá mañana sea peor que ayer, quizá mañana ya no haya mañana, pero
Quejarme no va resolver, todos los problemas que el futuro aguarda.
Pasele joven,
Pase que aquí estaré de pie hasta que se ahogue la calma.)

Solo otro escritor insomnio,
Buscando la verdad sin saber que está no se esconde.
Quieto, pero imponente como un roble,
Pues aún sin la mitad siempre voy a dar el doble.
Parte de un sistema podrido,
Con miedo algún infame en el que
Crecerá mi hijo, miro con cara de pocos amigos,
Igual que mis pocos amigos.
Exijo el respeto que doy a todo ser vivo,
Pero si alguien me lo falta se convierte en mi enemigo.
El bien no siempre es compasivo,
Pues aquél que busca La Paz no debe ser pasivo.
Fiel a mis ideales, navegando a la calma entre lluvias torrenciales.
Pues crecí en calles marginales con
Bestias más feroces que las de animal planet.
Entre sangre, droga, e histeria,
Y mucha gente buena sonriéndole a la miseria.
Más de algún modo eso me alegra, p
Ues para volverte luz hay que nacer de las tinieblas.