Lyrics Rosario - Fili Wey

Somos delincuentes, somos mercenarios
Levanten las manos la gente del barrio
Yo soy de la calle me escuchan los sicarios
Levanten las manos la gente del barriomi estilo es pistolero llega uno de los buenos
Vengo de un barrio bajo y te demuestro que podemos
Siempre a lo delincuente, siempre hago lo que quiero
El rap corre por mi sangre yo naci pa ser rapero
Muchos me critican pero no les da la mente
Dicen cosas delincuente pero no viven el presente
Mentes fantasmas, no digo chascarrillos
Con mi tema mas de uno seguro que quedo pillo
Y no me importa que diga la policia
Si a mi barrio no entran ni en plena luz del dia
Estan sarpados le sobra la cobardia
Porque no les da la nafta arrancan y no tiran
Se quieren matar porque yo siempre descanzo
Aunque me quieran callar yo voy a seguir sonando
Porque la gente a mi me elije a mi me escucha
Soy la nueva sensacion al que todos llaman lucas
Somos delincuentes, somos mercenarios
Levanten las manos la gente del barrio
Yo soy de la calle me escuchan los sicarios
Levanten las manos la gente del barrioescucha como suena volo otra sirena
Arranquen las pistolas escuchen como suena
Empieza el tiroteo los rafagasos vuelan
Se armo otra vala llega, la noche se puso buena
Caminando en los pasillos repartiendo cañasos
Yo busco la gloria no busco fracaso
No me caben giles que hacen de payaso
En la calle soy yo lo digo por si acaso
Activen tiren giles tiren berretines
Pero no los bancan y eso los deprime
Son re payasines son un re descanzo
Sientanse sarpados y hagan temas que los mato
Mi letra es como un estaca mi estylo como una metra
Quedas arruinado si intentas copiar mis letras
Te lo habiso te lo aclaro no olvides tenelo en cuenta
Para hablar de la calle tenes que vivir en ella
No me caben versos no me cabe el chamullo
Cuando pinta bondi me planto no hullo
La lluta te molesta por tener unos baguyos
Pero yo no se los doy es mio no es suyo
Somos delincuentes, somos mercenarios
Levanten las manos la gente del barrio
Yo soy de la calle me escuchan los sicarios
Levanten las manos la gente del barrio