paroles de chanson Enciende Una Luz - Marcos Witt

Enciende una luz y déjala brillar
La luz de Jesús, que brilla en todo lugar
No la puedes esconder, no te puedes callar
Ante tal necesidad, enciende una luz
En la oscuridad

En el mundo hay más
Del cuarenta por ciento de la población total
Que no han escuchado el nombre de Jesús
Esto representa 2.4 mil millones de gentes

No lo han oído ni en una canción
No lo han leído en sus libros de historia
La mayoría ni tiene libros de historia
Porque ni tienen alfabeto
Una gran parte de ellos son las etnias que viven aislados
De la sociedad, en las montañas y en los desiertos del mundo

Marginados y olvidados por los demás
Mientras que la Iglesia del Señor perdemos el tiempo
En discusiones, pleitos y divisiones, estos miles de millones
Se van a una eternidad sin Jesús ¿Qué vamos a hacer tú y yo?
¿Seremos la generación que lleve el mensaje de esperanza?
Entonces

Enciende una luz y déjala brillar
La luz de Jesús, que brilla en todo lugar
No la puedes esconder, no te puedes callar
Ante tal necesidad, enciende una luz
En la oscuridad

Dice Romanos, capítulo 10, verso 14
¿Cómo pues, invocarán a aquel en el cual no han creído?
¿Y cómo creerán en aquel de quien no han oído?
¿Y cómo oirán si nadie les predica?

Hermosos son los pies
De los que anuncian la paz
Las buenas nuevas de Jesús

Enciende una luz y déjala brillar
La luz de Jesús, que brilla en todo lugar
No la puedes esconder, no te puedes callar
Ante tal necesidad, enciende una luz
En la oscuridad

Enciende una luz y déjala brillar
La luz de Jesús, que brilla en todo lugar
No la puedes esconder, no te puedes callar
Ante tal necesidad, enciende una luz
En la oscuridad

Enciende una luz y déjala brillar
La luz de Jesús, que brilla en todo lugar
No la puedes esconder, no te puedes callar
Ante tal necesidad, enciende una luz
En la oscuridad

Enciende una luz y déjala brillar
La luz de Jesús, que brilla en todo lugar
No la puedes esconder, no te puedes callar
Ante tal necesidad, enciende una luz
En la oscuridad

Jesucristo dijo
Por tanto, id y haced discípulos a las naciones
Bautizándolos en el nombre del Padre, y del Hijo y del Espíritu Santo
Enseñándoles que guarden todas las cosas que os he mandado
Y he aquí que yo estoy con vosotros todos los días
Hasta el fin del mundo, amén
Enciende una luz en la oscuridad