paroles de chanson Compadre José del Carmen - Reynaldo Armas

Compadre José del Carmen
Le voy a pedí' un favor, no me le pegue al muchacho
Que a usted le pesa la mano
Y así se ensaña con él, sabiendo que no es pa' tanto

Compadre José del Carmen
Le voy a pedí' un favor, no me le pegue al muchacho
Que a usted le pesa la mano
Y así se ensaña con él sabiendo que no es pa' tanto

Cuando a nosotros nos criaron era distinto
Para los viejos era normal el maltrato
Nos daban duro porque así era que se hacía
Al rato nos consentían, apretados en los brazos

Un mundo nuevo se nos ha venido encima
Del tiempo viejo no están quedando ni rastros
No descarguemos nuestras furias y rencores
En nuestros tiernos primores, los hijos de los encantos

No me le pegue, mi compay, que él no es tan malo
No me le pegue, mi compay, que es casi un santo
Me acuerdo del día que lo bautizamos
Que el padre recomendaba, que el padrino se encargara de vigilarle los pasos

No, no me le pegue, mi compay, que él no es tan malo
No me le pegue, mi compay, que es casi un santo
Me acuerdo del día que lo bautizamos
Que el cura recomendaba, que el padrino se encargara de vigilarle los pasos

Compadre José del Carmen
Usted sabe igual que yo que cuesta formar un hijo
¿Por qué acabar con los pies
Lo que se hizo con las manos y con tanto sacrificio?

Compadre José del Carmen
Usted sabe igual que yo, que cuesta formar un hijo
¿Por qué acabar con los pies
Lo que se hizo con las manos y con tanto sacrificio?

Los animales sí que son inteligentes
Ellos castigan, pero de un modo distinto
Ay, quién pudiera ser como los animales
Para tener raciocinio y un sentimiento bonito

Después de todo, mi compay, disculpe usted
Si hay tantos padres que están haciendo lo mismo
Vaya con todo y que sirva de mensaje
Compadre José del Carmen y recuerde el compromiso

No me le pegue, mi compay, que él no es tan malo
No me le pegue, mi compay, que es casi un santo
Me acuerdo del día que lo bautizamos
Que el cura recomendaba
Que el padrino se encargara de vigilarle los pasos

No, no me le pegue, mi compay, que él no es tan malo
No me le pegue, mi compay, que es casi un santo
Me acuerdo del día que lo bautizamos
Que el padre recomendaba
Que el padrino se encargara de vigilarle los pasos