paroles de chanson In Some New - Cevlade , Feliciano Saldias

No me fue fácil clausurar los párpados
Ell mal del mar de lagrimas es q no es mar pa dos
Vago en la noche náufrago
Volví mis cuencas sótanos
Te regalo yo mis ojos
Ten, enmárcalos

Horizontes, verticaldes,
Se oyen errantes
No ver da igual,
Mi memoria es de elefante

El mundo se fue por Gamero hacia el poniente
Sólo hay oscuridad enfrente
Ya no hay vida por delante

Veo navíos surcando noches, rajando cielos
Sólo a dioses es lo q llevan sus pasajeros
Sus lágrimas, filosos cuchillos q abren la carne
Que sangre el cielo y de esa lluvia nos empapemos

Que las copas de los árboles
Se llenen, que suenen
Embriaguémonos
Porque embriagarnos
Ya no nos duele

Ebrio de oscuridad
Voy desvelao, de lao a lao
Sangro polvo de esta herida q aún no ha cerrao

No duermo y no veo
Más q tinieblas...
Sombras débiles y frágiles
Es todo cuanto se recuerda

Se me puso un engrudo de pus en los ojos, llega
Un dolor agudo en búsqueda
De otro bodega

No requiero colegas
Quiero ver verdad
Solo quiero beber más
Y ya no oler gas

Mientras más oscura
Es más interesante e intensa
La luz se extingue
Y no se distingue si se ve o se piensa

Cuando sales a navegar
Tu silueta cae en otro bar

Amar cansa.
Avanza hasta hallar la esperanza
Y callarla
Tallad la esmeralda
Al rayarnos el alma
Sóplame las telarañas
Sin llamarme "maldito"
El eufemismo es "karma"

Rasgad las vestiduras tiesas del mendigo
Dadle abrigo,
Un abrazo de amigo
Arrebátaselo al olvido

Siempre es noche pa mí,
Soy desvelao y ciego
Aún así, como un perro
Te sigo, subo y bajo cerros

Haz algo por mí,
No es mucho lo q te pido,
Un haz de luz
Hasta cuando no estés conmigo

Shhh, creo que la ciudad cruje
¿O es este agujero en mi pecho
Que ruge un "no me empujes"?

Me quieres sin querer
Sé que lo haces sin querer
Aquí me tienes
Soy yo quien no te puede ver

Y me puedo escuchar envejecer
Olvidé como dormir
Y el derecho a soñar no puedo ejercer

De vuelta en Santa Bernardina del Monte
Y el reloj vuelve a las doce, a las doce y luego las doce
Tú tomaste tu decisión
Tú tomas té y galletas
Pero no tienes paz,
Estás inquieta

Tú tomaste mis ojos,
Tomaste mis sueños
Ya no te puedo ver
Ni dormir
Sumergido en tu cuello

La noche se hizo eterna y el insomnio también
Desvelaos y ciegos
Ya no nos vemos tan bien

Cuando sales a navegar
Tu silueta cae en otro bar

Y otra noche más...
Y otra copa más...

Solo Hamond: Valentino Baos